La actuación es una profesión que implica aspectos especialmente exigentes para quien la ejerce, como son exponerse al juicio externo y propio, trabajar con la imagen personal y saber gestionar sus emociones, además, obviamente, de la propia técnica de interpretación.
Estas facetas reclaman a los actores y actrices un especial cuidado sobre sí mismos y una atención a la incorporación de nuevas herramientas y el desarrollo de habilidades que les permitan mantener un equilibrio vital y un crecimiento profesional.
Nuestra oferta es acompañar al artista a definir sus objetivos profesionales y personales, ayudándole a avanzar más rápidamente hacia ellos a través del Coaching Personal, disciplina que contribuye al desarrollo integral de una manera rápida y eficaz.